Mi teléfono no carga ¿Qué le sucede y cómo puedo solucionarlo?

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Mano sosteniendo un celular en la mano

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¿Alguna vez te ha pasado que conectas tu teléfono al cargador y no ves ningún indicio de que se esté cargando? ¿O que la batería se agota muy rápido y no llega al final del día? Si la respuesta es sí, no te preocupes, no eres el único.

Muchos usuarios se enfrentan a problemas de carga en sus dispositivos móviles, y las causas pueden ser muy variadas, por lo que en este artículo trataremos de explicarte algunas de las razones más comunes por las que tu teléfono no carga, y te daremos algunos consejos y soluciones prácticas para resolverlos sin tener que llevar a reparar el teléfono.

Comprueba el cable, el enchufe y el cargador

Lo primero que debes hacer si tu teléfono no carga es verificar que el problema no sea el cable, el enchufe o el cargador que estás usando. Estos elementos pueden sufrir desgaste, roturas, desconexiones o incompatibilidades que afecten a la transferencia de energía y dificulten la carga del teléfono.

Para comprobarlo, puedes hacer lo siguiente:

  1. Intenta cargar otro dispositivo con tu cable y cargador. Si funciona, el problema no está ahí. Si no funciona, prueba con otro cable o cargador que sepas que funciona.
  2. Asegúrate de que el cable esté bien conectado al cargador y al teléfono. A veces, un mal contacto puede impedir la carga.
  3. Revisa el estado del cable y del cargador. Si ves algún signo de daño, como cortes, dobleces, quemaduras o suciedad, es posible que necesites reemplazarlos.
  4. Comprueba que el enchufe de la pared tenga corriente y que no esté defectuoso. Puedes probar con otro enchufe o con una regleta de alimentación.
  5. Verifica que el cargador sea compatible con tu teléfono y que tenga la potencia suficiente. Algunos teléfonos requieren cargadores específicos o admiten ciertas tecnologías de carga rápida. Si usas un cargador inadecuado, puede que la carga sea muy lenta o que no se produzca.

Revisa el puerto de carga de tu teléfono

Otra causa frecuente de que tu teléfono no cargue es que el puerto de carga esté sucio, bloqueado o dañado. El puerto de carga es el orificio donde conectas el cable al teléfono, y puede acumular polvo, pelusas, restos de comida u otros objetos que impidan el contacto entre el cable y el teléfono. También puede sufrir algún golpe, caída o torsión que lo desplace o lo rompa.

Para solucionarlo, prueba con esto:

  1. Apaga el teléfono y desconéctalo del cargador.
  2. Introduce un palillo, un clip o una aguja con cuidado en el puerto de carga y muévelo hacia un lado y hacia otro para sacar la posible suciedad. Usa una linterna o una lupa para asegurarte de que no quede nada en el interior.
  3. Si ves algún daño en el puerto de carga, como una pieza suelta, doblada o rota, es posible que necesites llevar el teléfono a un servicio técnico para que lo reparen o lo cambien.
  4. Vuelve a conectar el teléfono al cargador y comprueba si se carga.

Echa un vistazo al estado de la batería

La batería es el componente que almacena la energía que necesita tu teléfono para funcionar, y también puede ser el origen de los problemas de carga. Con el tiempo, las baterías se van degradando y pierden capacidad, lo que hace que se agoten más rápido y que tarden más en cargarse. Además, pueden sufrir daños por sobrecalentamiento, sobrecarga, golpes o cortocircuitos.

Comprueba el estado de la batería de esta forma:

  1. Reinicia el teléfono. A veces, los problemas de carga pueden estar relacionados con fallos temporales del software del teléfono. Un reinicio simple puede ser suficiente para resolverlos y restablecer la carga normal de la batería.
  2. Conecta el teléfono al cargador y espera un minuto. Si ves un icono de batería, significa que el teléfono está apagado y se está cargando. Si ves una luz roja, significa que la batería está muy baja y necesita más tiempo para encenderse. Si no ves nada, puede que la batería esté agotada o dañada, y que necesites reemplazarla.
  3. Usa una aplicación de terceros para medir el nivel, la temperatura y la salud de la batería. Algunas de estas aplicaciones son Battery Doctor, AccuBattery o Ampere. Estas aplicaciones te pueden dar una idea de cómo está funcionando tu batería y si necesita algún cuidado especial.
  4. Evita exponer el teléfono a temperaturas extremas, como el sol directo, el frío intenso o el calor de otros dispositivos. Estas condiciones pueden afectar al rendimiento y a la vida útil de la batería.
  5. No cargues el teléfono más de lo necesario. Deja que la batería se descargue hasta un 20% o un 30% antes de conectarlo al cargador, y desconéctalo cuando llegue al 80% o al 90%. Así evitarás el efecto memoria y prolongarás la duración de la batería.

Revisa el software, pues es posible que el problema se encuentre ahí

El software es el conjunto de programas y aplicaciones que hacen funcionar tu teléfono, y también puede influir en la carga del mismo. Algunos problemas de software que pueden impedir la carga son los siguientes:

  • El teléfono tiene algún virus o malware que interfiere con la carga. Estos programas maliciosos pueden consumir mucha energía, bloquear el puerto de carga o dañar el sistema operativo. Para evitarlos, debes usar un antivirus, no descargar aplicaciones de fuentes desconocidas y no abrir enlaces sospechosos.
  • El teléfono tiene algún componente interno averiado que impide la carga. Algunos componentes, como la placa base, el chip de carga o el conector de la batería, pueden fallar por diversos motivos y afectar al proceso de carga. Para detectarlos, debes llevar el teléfono a un servicio técnico para que lo revisen y lo reparen.
  • El teléfono está encendido y consumiendo mucha energía mientras se carga. Algunas aplicaciones, como las redes sociales, los juegos o el GPS, pueden gastar mucha batería y hacer que la carga sea más lenta o que no se produzca. Para evitarlo, debes cerrar las aplicaciones que no uses, activar el modo avión o el modo ahorro de energía, y reducir el brillo de la pantalla.

Como has visto, hay muchas causas posibles por las que tu teléfono no carga, y también muchas soluciones. Lo importante es que no te desesperes y que sigas los pasos que te hemos indicado para identificar y resolver el problema. Si nada de lo que has hecho funciona, quizás sea el momento de cambiar de teléfono o de llevarlo a un servicio técnico de móviles.